Hola, Bienvenido Para Empoderarte en el Reino!

Puedes seguirnos en las redes sociales o suscribirte al feed.

¡Suscríbete a nuestro blog!

Recibe en tu correo las últimas noticias del blog. Sólo ingresa tu correo para suscribirte.

BIENVENIDOS, ORIENTACIÓN PROFESIONAL Y ESPIRITUAL A TU ALCANCE

EPISODIO: ENCUENTRO INESPERADO


Escrito por: Luis Miguel Garate



Episodio: Encuentro Inesperado



Armados y uniformados entraron con pasos acompasados en una columna recta y luego rodeándome en una fila de doce; inexpresivos entre la nube de polvo que provocaron al derribar la puerta. Todos de negro, con máscaras, desplegados como una cortina oscura y fúnebre.

— ¿qué está pasando aquí? — inquirí saber en tono amargo. Provocado por la desagradable sorpresa.

Sin respuesta alguna, en seguida apareció penetrando la cortina con sus ojos frenéticos, cabello hirsuto, baja estatura y una sonrisa taimada; de negro y sin máscara, luciendo su banda dorada en la parte superior del brazo derecho que lo distinguía como el jefe del comando.


— vaya, vaya. Debo reconocer lo difícil que fue encontrarlo — gruño con su voz grave y vibrante. — por fin tengo el placer de conocerlo personalmente señor Robinson.


«Pero si ya nos conocemos» pensé. Antes de responder, él se percató de mi actitud suspicaz.

— Parece sorprendido — frunció el ceño y aguardo expectante.

— ¿qué hacen aquí?

— ¿acaso no es obvio? ¿Qué pueden hacer el comando de defensa cultural frente al líder que intenta trastornar nuestro sistema? — No esperó respuesta — ya hemos eliminado a muchos de sus seguidores, pero al parecer se siguen multiplicando; así que es mejor arrancar el problema de raíz.

— yo no soy la raíz, ni mucho menos la simiente.
— eso dicen. Dígame algo, ¿porque lo hace?

« ¿Acaso no he expuesto mis razones públicamente? » podría negarme a responder, pero con gusto lo haría una y otra vez.

— justicia, no de hombre, sino divina. Aportando al establecimiento de la cultura del Reino, la misma por la que la tierra gime. Un Reino que no es de este mundo, pero si para este mundo, y ya son demasiados los años en los que la tierra ha sido privada de esa cultura.

— ¿un Reino que no es de este mundo? ¿Algo así como una colonia interestelar? — se burló —jah, es lo más descabellado que he escuchado en mi vida. ¿Porque no siguieron jugando a las tribus santas? y dejan de fastidiar con la ficción que intentan vivir.

— porque antes no entendíamos la misión para la que fuimos enviados. 

Extender la cultura del Reino de Dios.

— Pues para detener eso es que fuimos formados nosotros —me dirigió una sonrisa burlona.

— Eso no depende de ustedes —espeté — antes podrán detener huracanes con las manos, apaciguar terremotos con palabras, trasladar montañas de un lado a otro, pero nunca detener esto.

— vaya, ¿tan seguro está de eso?
— más de lo que cree. ¿Sabe porque? — baje la mirada solo para disimular la sonrisa de satisfacción que me causa decírselo. Pero pronto volví a mirarlo fijamente — porque ya está hecho en la eternidad.

Sus ojos saltaron levemente y pronto se escondió pusilánime su sonrisa burlona. Los hombres que formaban la barrera intentaron mirarse los rostros cubiertos, impacientes.

— Pues entonces el avance de esa cultura seguirá — replico mi verdugo, con un rostro que no dejaba traducir pensamientos. « ¿Será posible que lo haya entendido? » — pero sin usted, señor Robinson — escupió al tiempo que levantaba el arma apuntando mi rostro.

El tiempo insinuó detenerse, la fila sinuosa de hombres de negro parecían levantar armas, sincronizados y en cámara lenta, mi corazón no tardó en acelerarse y el ambiente se impregnó de un olor a muerte. Pero una repentina seguridad invadió mi mente, entendiendo por fin lo que estaba pasando.

— mi hora todavía no ha llegado, señor Prestom. Todavía hay una cosa que puedo hacer para continuar — dije al tiempo que le dedicaba una sonrisa.

— ¿cuál cosa?

— despertar.

Y así lo hice.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

TODOS MIS ARTÍCULOS DE ESTA PAGINA, A UN CLICK ¡VISITALOS!

¡GRACIAS POR TU VISITA! DEJAME TU COMENTARIO